Por: Diego Patricio Pérez
Incertidumbre, caras largas, tristeza y frustación han sido el pan de cada minuto en el nido americanista. La inminente eliminación del cuadro azulcrema de la última esperanza "libertadora" para salvar la temporada se cristalizó este miércoles cuando Flamengo lo derrotó 4 a 2 en el Estadio Azteca, llegando con esto la renuncia del técnico argentino Rubén Omar Romano.
Más allá de seguir con el plan de una reestructura o de estar preocupados por saber su futuro (que seguramente ya casi todos lo saben), se preveé, de acuerdo a lo acontecido, que se viene "La punta del iceberg"; El tiro de gracia para uno de los clubes más ganadores del futbol mexicano que hoy no solo no puede ganar, sino que las múltiples derrotas han sido sazonadas, además, con un toque de humillación tanto del rival como de los medios de comunicación.
Fue presentado Juan Antonio Luna en lugar de Romano. Menudo paquete el que decidió tomar el ex mediocampista del triunfador América de los ochenta, que resulta a su vez decepcionante en cuanto a declaraciones se refiere; hablar de simplemente "jugar por dignidad" a la hora de que un equipo como este intenta remontar un marcador de un torneo internacional, más allá que sean tres o diez goles resulta inadmisible, se esté en la situación que se esté. Solo le faltó decir "vamos por que hay que cumplir con el compromiso, sino ni íbamos".
Sin embargo, en su papel de interinato se puede entender que no se comprometa, sobre todo en un equipo en donde la crisis es cosa de todo momento y la retórica ya fue rebasada hace tiempo por el fracaso.
A menos que gane por tres goles el 7 de mayo en el
Maracaná, al ave le quedan dos partidos, uno de liga y el de vuelta ante el conjunto brasileño. Juan Antonio Luna habla de jugar por dignidad, si en verdad será así entonces que cancelen los cheques de todos y que no haya pago ni regalía alguna para ningún jugador, técnico o directivo. Sería interesante ver como juegan "por dignidad".
Incertidumbre, caras largas, tristeza y frustación han sido el pan de cada minuto en el nido americanista. La inminente eliminación del cuadro azulcrema de la última esperanza "libertadora" para salvar la temporada se cristalizó este miércoles cuando Flamengo lo derrotó 4 a 2 en el Estadio Azteca, llegando con esto la renuncia del técnico argentino Rubén Omar Romano.
Más allá de seguir con el plan de una reestructura o de estar preocupados por saber su futuro (que seguramente ya casi todos lo saben), se preveé, de acuerdo a lo acontecido, que se viene "La punta del iceberg"; El tiro de gracia para uno de los clubes más ganadores del futbol mexicano que hoy no solo no puede ganar, sino que las múltiples derrotas han sido sazonadas, además, con un toque de humillación tanto del rival como de los medios de comunicación.
Fue presentado Juan Antonio Luna en lugar de Romano. Menudo paquete el que decidió tomar el ex mediocampista del triunfador América de los ochenta, que resulta a su vez decepcionante en cuanto a declaraciones se refiere; hablar de simplemente "jugar por dignidad" a la hora de que un equipo como este intenta remontar un marcador de un torneo internacional, más allá que sean tres o diez goles resulta inadmisible, se esté en la situación que se esté. Solo le faltó decir "vamos por que hay que cumplir con el compromiso, sino ni íbamos".
Sin embargo, en su papel de interinato se puede entender que no se comprometa, sobre todo en un equipo en donde la crisis es cosa de todo momento y la retórica ya fue rebasada hace tiempo por el fracaso.
A menos que gane por tres goles el 7 de mayo en el
Maracaná, al ave le quedan dos partidos, uno de liga y el de vuelta ante el conjunto brasileño. Juan Antonio Luna habla de jugar por dignidad, si en verdad será así entonces que cancelen los cheques de todos y que no haya pago ni regalía alguna para ningún jugador, técnico o directivo. Sería interesante ver como juegan "por dignidad".
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